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El Club Sport Emelec fue convocado a una nueva audiencia por parte del Viceministerio del Deporte para este miércoles 31 de diciembre de 2025, a partir de las 10h00, la cual se desarrollará de forma telemática. En la diligencia estarán presentes Jorge Guzmán, presidente del club, y la parte denunciante, Carlos Puga, en el marco del proceso relacionado con la inscripción oficial del actual directorio eléctrico.

Esta audiencia será determinante para el futuro institucional del Bombillo, ya que permitirá avanzar en la definición administrativa de la directiva encabezada por Guzmán. Desde el entorno azul se espera que la sesión marque un punto clave para destrabar la situación dirigencial y dar mayor estabilidad al club de cara a los próximos desafíos deportivos y financieros.

Tras la revocatoria de la medida cautelar interpuesta por el socio Jalil, quedó habilitada la realización de la audiencia del Ministerio de Educación, Deporte y Cultura contra el Club Sport Emelec. Con esta resolución, el proceso administrativo retoma su curso sin obstáculos legales y entra en una fase determinante que podría marcar el futuro institucional del conjunto eléctrico.

La diligencia será clave para definir el rumbo de la acción presentada por la cartera de Estado. En caso de que el Ministerio resulte favorecido, el procedimiento administrativo de revisión continuará conforme a la normativa vigente y podría derivar en la revocatoria del registro del actual directorio. De concretarse este escenario, Emelec quedaría en condición de acefalía y se abriría la posibilidad de una intervención, con la designación de un representante legal temporal por parte de la Federación Ecuatoriana de Fútbol hasta que se regularice la dirigencia del club.

La directiva de Emelec evalúa la propuesta presentada por Michael “Gambetita” Arroyo, quien se ofreció para reforzar al club hasta junio de 2026. Según informó el periodista Javier Ruiz, ya existen conversaciones entre las partes, confirmadas por un directivo del cuadro azul, lo que abre la posibilidad de un retorno del volante ofensivo al equipo donde inició su carrera profesional.

La propuesta contempla un gesto importante por parte del futbolista, quien estaría dispuesto a no percibir salario durante los primeros seis meses. En caso de que su rendimiento sea satisfactorio, se analizaría la firma de un contrato por el resto de la temporada. Arroyo, que debutó en Emelec en 2005 y fue parte del plantel vicecampeón nacional, podría volver a vestir la camiseta eléctrica, mientras la dirigencia analiza los aspectos deportivos e institucionales de su posible regreso.

Desde el Club Sport Emelec se trabaja en la planificación deportiva de cara a la temporada 2026 y uno de los nombres que aparece en carpeta es el de Kevin Arroyo. El futbolista es considerado una opción importante para fortalecer el plantel, dentro del proceso de renovación que busca devolver al equipo el protagonismo en el fútbol ecuatoriano.

Para que su llegada pueda concretarse, la institución eléctrica debe resolver primero las prohibiciones de fichar impuestas por la FIFA. En Emelec existe optimismo en poder superar esta situación administrativa y así avanzar en la incorporación de refuerzos que potencien al equipo para los desafíos venideros.

El mediocampista peruano Alfonso Barco se refirió a su salida de Emelec y fue sincero al explicar los motivos que lo llevaron a rescindir su contrato con el club guayaquileño. En una entrevista con Exitosa Noticias, el volante de 24 años destacó el cariño de la hinchada azul, pero lamentó los problemas institucionales y económicos que atraviesa la institución, situación que terminó siendo determinante en su decisión.

Barco confirmó que actualmente no tiene un nuevo destino definido, aunque espera concretar una oportunidad en el extranjero antes de finalizar el año. “Emelec es una institución muy linda, con una hinchada de mucho arraigo, pero a nivel institucional tiene muchos problemas. Consideré que lo mejor era salir para poder seguir creciendo”, señaló el futbolista, quien aseguró que se mantiene a la espera de un proyecto que le permita continuar su desarrollo profesional.